La pasta es uno de los platos favoritos para el común de los mortales, pero desgraciadamente, cada vez tenemos que reducir más la ingesta de nuestros platos favoritos de pasta. ¿El motivo? El alto contenido en hidratos de carbono, y la tendencia a mezclarla con salsas pesadas y poco saludables, hace que sea un lujo que rara vez podemos incluir en nuestra dieta.

Pero tranquilo, hemos estado investigando a fondo, para mostrarte las mejores formas de disfrutar de la pasta con platos saludables. Incluyendo estas recetas y con estos consejos, podrás llevar una dieta balanceada y equilibrada, con hueco de sobra para disfrutar de tus platos de pasta favoritos.

Como aligerar tus platos de pasta para hacerlos mucho más saludables

Aprovecha esta información para disfrutar de tus platos de pasta preferidos sin tener que sentirte culpable por ello. Se trata de encontrar los ingredientes y aderezos adecuados, así como el tipo de pasta más indicada para mantener tu dieta a raya.

Puedes escoger pasta de trigo integral

Hoy en día, hay una increíble variedad de opciones de pasta más saludables en esperándote en los lineales de tu supermercado favorito. En el pasillo de la pasta se pueden encontrar fácilmente varios tipos de pasta integral.

La pasta de trigo integral aumenta la cantidad de fibra (y por lo tanto la saciedad) empaquetada en cada porción, lo que significa que no necesitarás comer tanto para sentirte saciado.

¿Sabías que puedes usar verduras en lugar de pasta?

Alternativamente, podrías renunciar por completo a la pasta tradicional y usar fideos vegetales. Los espaguetis calabaza son una opción fácil, pero también puedes encontrar pasta de calabacín, remolacha o boniato en espiral.

Cualquiera de estas opciones puede utilizarse en lugar de la pasta en sus platos favoritos. Estas alternativas de fideos no sólo son mucho menos calóricas que las pastas tradicionales, sino que también añaden fibra y una variedad de vitaminas y minerales a su plato.

Vigila el tamaño de las porciones

A todos nos encanta la pasta, y con casi todos los platos, aunque estás lleno, están tan buenos que podrías seguir comiendo hasta reventar. Pero lo mejor es pararse a pensar: ¿cuánto necesito realmente para estar saciado?

Prepara raciones de no más de 100 gramos por persona, y si te sobra espacio en el plato, acompaña tu pasta con unas verduras o un poco de ensalada.

Confía en la proteína magra

La pasta se sirve comúnmente con carnes de mayor contenido graso, como ternera, carne molida o productos de cerdo. Para hacer rápidamente que un plato de pasta sea más saludable, prueba a usar una proteína magra en su lugar.

Por ejemplo, puedes decidir utilizar parte o todo el pavo molido en las albóndigas o salsa de boloñesa. O bien, renuncia por completo a las carnes pesadas y incluyendo almejas o camarones en el plato de pasta.

Añade fibra

La fibra no sólo es buena para la digestión, sino que también te hace sentirte lleno más rápido. El uso de fideos de trigo integral o vegetales espirales agrega fibra, pero si prefieres la pasta tradicional, hay otras formas de aumentar el contenido de fibra también. Por ejemplo, intenta mezclar verduras con alto contenido de fibra como el brócoli o los guisantes, o añadir alubias o legumbres a tu plato de pasta.

Tratar el queso como un condimento, no como un ingrediente

Admito que puede ser un ajuste difícil de hacer. Pero cambiar el queso de las recetas de pasta puede hacer que tus platos sean mucho más saludables.

Empieza a pensar en el queso como un condimento o una especia final, para ser usado ligeramente antes de servirlo en vez de como la base del plato. Por ejemplo, la pasta con aceite de oliva y verduras puede terminarse con un poquito de queso en polvo, en lugar de sacar una bandeja de macarrones rebosante de queso fundido por encima.

Los mejores consejos de nutricionistas para mantener el equilibro en la dieta comiendo pasta

Muchos nutricionistas mantienen platos con pasta en sus menús para perder peso, ¿cómo es posible? Porque las grasas saludables tardan más tiempo que los carbohidratos en digerirse y se quedan en el estómago para ayudarte a sentirte más saciado.

A pesar de que algunas grasas como la pasta se han posicionado en el conocimiento popular como un enemigo de la vigilancia del peso, pueden ser saludables.

Cuando los expertos hablan de grasas saludables, generalmente se refieren a las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas. Estas ayudan a reducir el colesterol LDL (que es el tipo que obstruye las arterias) y pueden reducir el riesgo de diabetes tipo 2.

Nuestra recomendación es usar una cucharadita de aceite de oliva y la cantidad de sal, pimienta y otras especias que prefieras para sazonar y aderezar el plato.

Si estás vigilando las calorías, asegúrate de medir el aceite de oliva en lugar de verterlo directamente de la botella. Una sola cucharada de aceite de oliva tiene unas 119 calorías y no querrás triplicarlas por accidente.

O, si te sientes aventurero, añade aguacate directamente a la sartén o mézclalo con albahaca para una salsa pesto de aguacate.

Como ves, hay muchas y variadas formas de disfrutar de la pasta de una forma saludable. Solamente debes estar bien pendiente de las cantidades y los aderezos.

Siguiendo estos consejos y con las recetas de pasta que tenemos en nuestro blog y canal de Youtube, seguro que encuentras inspiración más que de sobra para disfrutar de tus platos de pasta, sin pizca de remordimiento por ello.

Como siempre todos los ingredientes y opciones que necesitas para preparar tus platos de pasta saludables, te están esperando en los lineales de tu supermercado Dialprix más cercano.

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